Sentimientos de la Nación , 1813 – Constitución de Apatzingán, 1814 – Estado de Morelos, 1869
Memoria histórica de aporte al presente
y
de proyección al óptimo porvenir de México
Hermanamiento José
María Morelos y Pavón
Asociación de Prensa y Fotógrafos de
Jacona, A. C., APREFOJAC – Asociación de Periodistas y Comunicadores de Morelos,
APECOMOR
Prensa Libre
Jacona, Michoacán. Número 868. Lunes 25 de noviembre
de 2013.
El ejército independentista de
Morelos tomó Oaxaca
Eduardo
Garibay Mares
El
general José María Morelos y Pavón venció a los imperialistas fortificados en
Oaxaca, el 25 de Noviembre de 1812, cuando tras sitiar en la ciudad al teniente
general español Antonio González Saravia, luego de feroz combate que duró de
las 10 de la mañana a la una de la tarde, los insurgentes toman la plaza.
Fue
en la fría madrugada de ese día, que a su llegada a las inmediaciones de
Oaxaca, con cinco mil hombres y cuarenta piezas de artillería, el Generalísimo
Morelos se instaló en la garita del Marquesado. Lugar desde el cual envió una
carta al cabildo de Oaxaca, al deán y a los militares virreinales defensores de
la ciudad, emplazándolos a rendirse, en el entendido de que si en cuatro horas
no lo hacían, atacaría hasta tomar la plaza.
Al
no darse la rendición de los imperialistas, al acometer las fuerzas de Morelos
se distinguió luchando Guadalupe Victoria, quien al atacar uno de los frentes
de batalla que estaba guarnecido por un foso, y en el cual los soldados
realistas ofrecían más resistencia, decido arremetió con los independentistas a
su mando ante el terrible fuego abierto por el enemigo desde lo alto de
edificios y casas vecinas.
Fue
entonces cuando impaciente por tomar la plaza, el independentista Victoria
mostró su arrojo cuando al aventar decidido su espada al otro lado del foso,
exclamó: “Va mi espada en prenda, voy por ella”, al tiempo que se lanzaba al
foso para cruzarlo a nado envuelto por el humo de las descargas. Acción que
motivó a sus soldados, quienes prestos lo siguieron y muy pronto se adueñaron
de aquel frente de resistencia que defendía la plaza, culminando así el triunfo
sobre los derrotados imperialistas.
La
toma de Oaxaca representó un duro golpe al virreinato; pues además de la
posesión de tan importante población y provincia, los insurgentes se hicieron
de pertrechos, lograron también efectos valiosos tales como gran cantidad de
semillas y cosechas, tabaco, dinero.
Luego
de la toma Morelos posibilitó la integración del Ayuntamiento, formado sólo por
mexicanos.
Comunicado de Morelos a Ignacio López
Rayón por la toma de Oaxaca
Oaxaca,
19 de diciembre de 1812.
Excelentísimo
Señor Presidente de la Suprema Junta
Nacional Gubernativa
Lic.
Don Ignacio Rayón.
El
25 del inmediato noviembre pensé entrar en Oaxaca, y entré con pérdida de doce
hombres.
La
acción no se me debe a mí, sino a la Emperadora Guadalupana ,
como todas las demás.
Satisfago
con los adjuntos, y porque el tumulto de ocurrencias no permite dar lleno el
correo de hoy, lo hará circunstanciado nuestro secretario Zambrano en esta
semana, como porque hay mucho que decir y todo favorable.
Dios
guarde a Vuestra Excelencia muchos años.
Cuartel
General en Oaxaca, diciembre 19 de 1812.
José Ma. Morelos [rúbrica]
Idea y acción. Movimientos:
insurgente de Hidalgo e independentista de Morelos, y Revolución Mexicana
Ideas, acciones y tendencias
Las dos grandes corrientes que propician
estallidos revolucionarios son: Una, la de las ideas, esencialmente aquéllas
venidas de la burguesía sobre la reorganización política de los estados, para
su beneficio; y otra, la de la acción, venida de las masas populares,
campesinos y proletarios que pugnan por mejoras inmediatas de sus condiciones
de vida.
Forja de movimientos revolucionarios
Previo
a todo estallido revolucionario, ayer, igual que hoy, élites intelectuales se
encargan de socavar cimientos de la sociedad, en la que cargos de gobierno y
riquezas pertenecen a las élites y demás grupos de poder, en tanto que la masa
del pueblo sobrevive en situación de bestia de carga de tales poderosos.
Así
es que al preparar en la mentalidad general la caída del régimen en el poder,
simultáneamente se abren entonces supuestos horizontes distintos para la
población: Primero, al proclamar la igualdad de todos los hombres, sin
distinción de origen, exigiendo a todo ciudadano, gobernante o campesino, la
obediencia a la ley, hecha por “los representantes del pueblo” y por ello
considerada expresión de la voluntad nacional; y segundo, al demandar la
libertad en los contratos entre hombres libres y la abolición de las
servidumbres.
Teoría con el pueblo y práctica de espaldas al pueblo
Desde
luego la idea sola no basta para que estalle la revolución. Hay que pasar de la
teoría a la acción, del ideal gestado en la mente de la población, a su
práctica en los hechos. Hay que comenzar la realización del ideal. Porque una
revolución es más que una serie de insurrecciones en campos y ciudades; es más
que manifestaciones de inconformidad en las calles; es mucho más que una lucha
de partidos políticos empoderados en la partidocracia; e infinitamente más que
un simple cambio de partido en el poder.
E
igual es obvio que no basta que se produzca un movimiento de las ideas entre la
burguesía y los partidos políticos, cualquiera que sea su intensidad, ni que
surjan movilizaciones por parte de los marginados sectores de población
mayoritaria, cualesquiera que sea su número y extensión: Es preciso que la
acción revolucionaria, surgida del pueblo, coincida con la proyección del
pensamiento revolucionario, procedente de los grupos de poder instruidos. Se
precisa de la unión de pensamiento y acción.
Sin
embargo, para comprender la idea que inspira a las élites han de juzgarse sus
resultados: Los estados modernos, bosquejados desde los inicios de movimientos
insurgentes, independentistas y revolucionarios, con sustento en una
centralización de poderes que, uniforme y perfecta, funciona hasta nuestros
días para los sempiternos grupos de poder, cual mecanismo en que con una orden
dada desde una capital se pone en movimiento a una nación, o una provincia, a
la población mayoritaria toda, igualmente dispuesta no sólo a llevar devastación
a los campos y duelo a las familias, sino a confrontarse con otros países.
Territorios
cubiertos, casi, por una red de administradores caracterizados por su usufructo
burocrático y obediencia maquinal a órdenes emanadas de una voluntad central: el
arbitrio del “elegido popular”, a la vez que por los medios más oscuros
influyen al pueblo con ideas igualitarias que hacen resplandecer la rebeldía, e
iluminan las inteligencias, siendo entonces que la esperanza de un próximo
cambio hace latir aceleradamente los corazones más humildes, un prometido
cambio que traerá consuelo a las miserias del pueblo, con base en dos ideas
fundamentales: La de la igualdad de todos en sus derechos y el derecho de la
nación a todas las propiedades territoriales y a todas las riquezas naturales,
para el bien común. Sí ideas que continúan siendo una mera utopía.
Idea, acción de Morelos, por México: Tarea pendiente
Respecto
a la unión idea y acción, propicia para estallidos revolucionarios, es evidente
que mientras los proyectos de nación a favor del bienestar del pueblo no toman
una forma clara y concreta, las ideas en pro de la burguesía instruida sí se
sustentan en un programa completo de organización política y económica con el
que, en contraparte, se le presentan al pueblo ideas de emancipación y
reorganización económicas sólo bajo la forma de vagas aspiraciones, que no
pasan de ser más que meras promesas.
También
es obvio que ayer, igual que hoy, desde los grupos de poder político, económico
y social se evita precisar un proyecto de nación del pueblo, con el pueblo y
para el pueblo, puesto que en todo tiempo los apoderados del país siempre
consideran innecesario hablar de cómo se organizará después el pueblo, del que
sólo usan la fuerza del ataque contra las instituciones a derrocar, toda vez
que ellos, los “mesías”, se encargarán de “arreglarlo” todo después.
Por
eso es que hoy, todavía, “populares predestinados” a cargos gubernamentales
arguyen promesas de cambio beneficioso para el pueblo, dado que tales
ambiciosos de poder saben que sin esas rebeliones, producto de la perenne
desorganización gubernamental y pugna de los manipulados poderes, sus burgueses
movimientos nunca triunfan, toda vez que requieren de la prontitud del pueblo
para luchar contra las fortalezas del régimen a vencer. Pueblo al que todavía
no se le ha hecho justicia, ya que igual que no aplican en bien del país y su
gente lo proclamado por José María Morelos y Pavón.
Es
ante el violento estallido de disturbios en medio de inseguridad, brotes de
violencia ciudadana, e incumplimiento gubernamental del pacto social de casi
todas las autoridades de los diferentes partidos políticos, en contubernio con
medios de comunicación masiva, que las crecientes condiciones de pobreza y
marginación de un pueblo por ello usado electoreramente, exhortan a los grupos
de poder político, económico y social a aprender ya la lección y encauzar los
resultados derivados de la idea y la acción unidas revolucionariamente, para
que la igualdad y bien común sean ahora una realidad y no una utopía cada vez
más lejana.
Eduardo
Garibay Mares
Crónica de Morelos. Noviembre 13 a 25
Día 13
1810:
Llegó Morelos con su ejército al Cerro del Veladero, donde a la vista del
puerto combatió al capitán Luis Calatayud y a sus fuerzas virreinales. Tras
vencerlos al tercer día incrementó sus filas y sus pertrechos militares.
Día 16
1810: Tras triunfar
en el Cerro del Veladero con su Ejército del Sur, que para entonces era de tres
mil hombres armados, Morelos se fortificó en Paso Real de laSabana, del
territorio de la
Intendencia de México, próximo ya al puerto y al fuerte de
San Diego, a fin de iniciar hostilidades para cortar comunicación y recursos
llegados con la Nao
de China de Filipinas, país igual dominado por
el imperio español.
Día 17
1815:
Intercedieron sin éxito ante Félix María Calleja los miembros del Congreso del
Anáhuac, a favor de la vida de José María Morelos, prisionero del ejército
virreinal.
Día 22
1815:
José María Morelos llegó encadenado a la cárcel de a Inquisición de la Ciudad de México, tras ser
apresado por los imperialistas desde el anterior día 6.
Día 25
1811:
Se posesiona de Oaxaca el general Morelos y al planear su avance militar le
otorgó el grado de coronel a Benito Rocha, al que le encargó la ciudad y lo
nombró gobernador de la provincia.
Eduardo
Garibay Mares
FRASE de PIE de PAGINA
2, 1ª DE NOVIEMBRE:
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